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En 1992, Don Raney tomó una decisión que cambió su futuro. Don había estado en el negocio de seguros durante 30 años, pero había perdido su trabajo como vendedor de seguros para una gran compañía de seguros nacional debido a razones de salud diez años antes. Una carrera más reciente para un cargo público no había tenido éxito. Con los ahorros familiares casi agotados, había comprado una pequeña agencia de seguros local independiente que operaba desde el sótano de la oficina de correos de Dodge City, pero también estaba pasando apuros. Su familia se las había arreglado con ahorros, pero ahora su situación era desesperada. Necesitaba un plan para brindar más estabilidad financiera a su familia.

Fue un viernes que Don hizo una observación que cambiaría las cosas para su agencia de seguros y se convirtió en el comienzo de un negocio próspero y exitoso que no solo impactó positivamente a su familia sino también a la comunidad donde vivía. Don notó que había un número creciente de trabajadores migrantes de la planta procesadora de carne recién inaugurada que venían a la oficina de correos los viernes por la tarde para enviar cheques de pago semanales a sus familias. A veces se detenían en su pequeña agencia mientras estaban allí para preguntar sobre el seguro de automóvil. Los trabajadores de temporada necesitaban pólizas a corto plazo, pero una vez emitidas, sus pólizas generalmente caducan cuando termina la temporada de trabajo. Tuvo la suerte de tener un compañero, Berna Márquez, que hablaba inglés y español con fluidez. Esto ayudó a cerrar una brecha para los trabajadores que a menudo luchaban con la barrera del idioma. Mientras algunas agencias rechazaban a estas personas, Don decidió abrazarlas.

La esposa de Don, Sharron, finalmente se retiró de su trabajo en el sistema escolar, donde acompañó a la orquesta durante más de 30 años y entretuvo al público en los musicales de verano con su hija Mischel. Después de jubilarse, ayudó a su esposo Don a administrar la empresa y, finalmente, asumió el cargo en 2008 cuando Don experimentó problemas de salud. Fue en 2011 cuando Nelson Mirt, el esposo de Angie, se unió a la agencia para ayudar a Sharron en la operación y administración diaria del negocio.

Don falleció en 2015. Su hijo mayor, Mark, se involucró para ayudar a Sharron a modernizar la agencia. Bajo el liderazgo de Mark Raney, se realizaron actualizaciones a los sistemas y procesos para atender mejor a la próxima generación de clientes en el centro de Kansas y más allá.